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martes, 24 de julio de 2012

LA EDUCACIÓN EN TIEMPOS DE INCERTIDUMBRE: LAS APUESTAS DE LA PEDAGOGÍA SOCIAL



LA ESCUELA COMO PLATAFORMA DE INTEGRACIÓN. LA EDUCACIÓN SOCIAL Y LA ESCUELA ANTE LOS DESAFÍOS DE UNA SOCIEDAD EN TRANSFORMACIÓN (VIOLENCIA, RACISMO, GLOBALIZACIÓN...)

La escuela, posiblemente como ninguna otra institución o agencia, sobre todo la escuela pública, ha servido a la igualdad y a la integración social de los individuos en la sociedad. Estos fines y principios básicos (Gimeno, 20001:12) deberían en todo caso ser preservados frente a todo tipo de cambios, modificaciones o transformaciones de la escuela que puedan devenir en el futuro. Estos fines y cometidos generales coinciden con los fines y cometidos específicos de la educación social. Pero la escuela en nuestros días en Occidente está sometida a ataques, desafíos y problemas que la hace tambalear y suponer su, cuando menos, transformación en algo diferente a lo que ha venido siendo hasta la actualidad. Las embestidas le vienen del mercado de una sociedad de capitalismo avanzado, de la privatización de la enseñanza…, pero últimamente y sobre todo de la mundialización, de la llamada globalización propiciada por los medios de comunicación social, la llamada Sociedad de la Información (SI) y los fenómenos relacionados con ella.

Muchos, pues, son los desafíos y problemas a los que se enfrenta la educación en general en nuestros días y en especial el sistema escolar, pero sin duda el de la violencia, que se manifiesta también en la escuela, es uno de ellos.

VIOLENCIA  EN LA ESCUELA Y EDUCACIÓN SOCIAL
La violencia en las escuelas, sobre todo en los institutos de enseñanzas medias, ha venido a ser el detonador de la preocupación por la educación social de los alumnos, pero también es sin dudad el iceberg de un problema más profundo.
Los fenómenos  de violencia en los establecimientos escolares de Francia y España han traído a la actualidad las relaciones entre la escuela y la educación social, pero estamos ante un problema complejo que aflora en esas manifestaciones circunstanciales, pero que poco a poco irá cobrando significación, si no se aborda con rigor estructural, institucional y educativo.
La solución tampoco se direcciona hacia la introducción de departamentos de policía en los centros educativos; existen soluciones que apuntan a la propuesta de introducir en los centros la figura de un educador social o de cualquier otro profesional de las ciencias sociales, psicólogo, pedagogo social, trabajador social con funciones específicas al respecto, está claro que es una cuestión diferente, pero también tiene su historia, sus implicaciones e inferencias y por supuesto no por ello se solucionaría el problema.
ELABORADO POR ALEJANDRA GONZALES LUCANA


FUNDAMENTOS DE LA DIDÁCTICA DE LA LENGUA Y LA LITERATURA